Una fuente ha sido abierta: ven y bebe

Categoría: Sermon Jams

Este mismo Jesús que fue crucificado – Él se ha levantado de los muertos y es la declaración pública de Dios que Jesús de Nazaret era el Hijo de Dios y que su muerte en ese madero satisfizo la justicia una vez y por todas. Y este Jesús ha ascendido y se ha sentado a la diestra de Dios. Y Él es Rey de reyes y Él es Señor de señores. Todos los imperios de este mundo vienen y van como el viento. Sus palacios se desmoronan como el polvo. Sus reyes son nada más que niñitos jugando a la realeza. Hay un Señor y no es César. Es Jesucristo. Y Él regresará, y Él juzgará a los vivos y a los muertos, y los grandes libros serán abiertos, y si no has corrido a Cristo, entonces te será dado justamente todo lo que mereces de acuerdo a todo lo que alguna vez hayas pensado, todo lo que alguna vez hayas dicho, y todo lo que has hecho. ¿Eso te hace temeroso? Debería. Pero sin embargo la Biblia dice que una fuente ha sido abierta en la casa de David- una fuente para limpieza. La Biblia dice: ¿estás sediento? Ven y bebe. ¿Estás hambriento? Ven y come. ¿Estás sucio? Ven y sé limpiado. Cualquiera que lo haga puede ser salvo. Quien venga a Cristo no será desechado. La persona más religiosa del mundo debe de saber que su religión no puede salvarlo y sus buenas obras son nada más que trapos de inmundicia. Debe de ser advertido de su orgullo. Debe correr a Jesús. Y sin embargo, la prostituta más sucia en la calle; el drogadicto y criminal más endurecido; hasta el más vil asesino debe de levantar su cabeza y saber esto: su pecado no es más grande- no es más grande que la gracia de Dios en Jesucristo. ¿Eres un pecador? ¿Estás sucio? ¿Estás sucio? ¿Has hecho cosas inmencionables? Nosotros también, pero fuimos limpiados. Fuimos lavados por la sangre del Cordero. Fue derramada por nosotros en ese madero. ¡Tú puedes ser salvo! Y no sólo salvo, puedes ser cambiado. Si alguno está en Cristo, nueva criatura es. Las cosas viejas pasan. Todas las cosas son nuevas. Él puede cambiar tu vida. Una de las cosas más tristes de predicar es que nunca puedes decirlo como debe de ser dicho. Los sermones siempre son un fracaso porque Jesús es demasiado hermoso para describir. Ninguna palabra pueden explicar la grandeza de su amor. Su sacrificio en el madero va más allá de lo que el poder de hombres o ángeles puede describir. Si no conoces a Cristo, y dices, “bueno, soy religioso;” o dices, “asisto a la iglesia;” o, “soy ortodoxo;” o, “soy bautista,” o, “soy metodista;” pero escúchame. Si tu vida no ha cambiado, eres nada. ¿tu vida ha sido cambiada? ¿Amas a Jesús? No estoy hablando de un boleto al cielo. No estoy hablando de que oraste una oración una vez en tu vida y por lo tanto estás bien. ¿Hay evidencia de fe? ¿tu vida ha sido cambiada? ¿Continúa cambiando? En lugar de caminar con el pecado ahora, ¿luchas contra él? ¿Quieres amar más? ¿Quieres ser mas devoto a Cristo? Estas son las señales de un verdadero cristiano. Si no eres cristiano, te ruego, ¡arrepiéntete! Eso quiere decir cambia tu mente. Amabas al pecado. Cambia tu mente. Reconoce lo terrible que es y desea la justicia. Has ignorado a Dios toda tu vida. Cambia tu mente. Vuélvete hacia Dios. Reconoce cuánto valor es Él. Vuélvete de tu pecado. Reconócelo. Y cae sobre Cristo. Confía en Él. Confía en Él. Deja de confiar en tu propia justicia. Deja de confiar en tus propias buenas obras. Reconoce que hay sólo una forma de ser salvo: fe en Jesucristo. Si yo muriese ahora mismo, iría al cielo. No porque soy un pastor o maestro. No porque nuestro ministerio ayuda a los pobres y enseña a los niños a leer. Si yo muriese ahora mismo, iría al cielo por una razón: Jesucristo murió por pecadores. Esa es nuestra única esperanza. Y mientras más pecaminoso eres, más poderoso es Él para salvar. No me importa lo que hayas hecho. No me importa en lo que te has convertido. Él puede salvarte y lo hará. Él desea que todos los hombres sean salvos y que vengan al conocimiento de la verdad. Él está ofreciendo su mano todo el día, incluso cuando la gente no escucha. “Vengan a mí,” dice Él. Él es el camino, la verdad, y la vida. No hay otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos. Hay solo un Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre. Y todo el que en Él cree será salvo. Y ninguno que alguna vez creyó en Él fue decepcionado. Joven, escúchame. La vida es un vapor. Un día eres joven y viejo el prómixo. Todas las cosas de este mundo no pueden llenarte. Corre a Cristo y conoce la plenitud del amor de Dios. Tal vez has hecho cosas horribles, cosas inmencionables, cosas vergonzosas. Te sientes sucio, estropeado y manchado. Él puede limpiarte y hacerte nuevo. ¡Nuevo! Él no sólo perdona tus pecados. Él los olvida. Los pone tan lejos de ti y de Él como el este está del oeste. ¡Y lo increíble es que esta promesa es para todos nosotros! Si vas al infierno es porque así lo escogiste. Fue obra tuya. Él se para aquí y es poderoso para salvar. Puedo testificar que Jesús puede salvar el peor de pecadores porque yo era el primero de todos. ¿Cuántos otros aquí esta noche pueden testificar que Jesús salva pecadores? Si no eres cristiano, mira al rededor a todas estas personas. Todos dicen que eran pecadores. Todos dicen que no podían salvarse a sí mismos. Y todos dicen que Jesucristo los salvó y los limpió. Ahora cristianos, tengo una pregunta. ¿Cuántos de ustedes alguna vez han sido decepcionados en Jesús? ¿A cuántos de ustedes Jesús les ha fallado? Me parece que Jesús tiene un historial bastante bueno.